Clarín | 5 de marzo de 2021
Alemania acuerda monto de compensación por salida de energía nuclear
El Gobierno alemán llegó, tras varios años de disputa, a un acuerdo con las empresas energéticas sobre el monto de las compensaciones por el abandono anticipado de la energía nuclear, según confirmaron hoy en una declaración conjunta los Ministerios de Medio Ambiente, Hacienda y Economía.
De acuerdo con el comunicado, los grupos energéticos RWE, Vattenfall, Eon/PreussenElektra y Enbw recibirán una compensación conjunta de 2.430 millones de euros (2.922 millones de dólares) por pérdida de ingresos e inversiones realizadas en vano.
Según las cifras que ahora se han anunciado de manera oficial, Vattenfall recibirá la mayor parte de la compensación, 1.425 millones de euros. Por su parte, se destinarán 880 millones de euros a RWE, 80 millones a EnBW y 42,5 millones a Eon/PreussenElektra.
Según informes, el acuerdo resolvería todos los litigios existentes, incluida la demanda de Vattenfall ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI) del Banco Mundial, a través de la cual el grupo pretendía inicialmente una indemnización de 6.000 millones de euros.
El acuerdo pone fin a un litigio de diez años. La demanda de indemnización había surgido como consecuencia de la sorpresiva salida de Alemania de la energía nuclear en 2011, tras el accidente del reactor de Fukushima, cuyo décimo aniversario se celebra el 11 de marzo.
En aquel momento el Gobierno germano retiró la prórroga del plazo de operación de las centrales nucleares, que se habían decidido solo unos meses antes, y estableció fechas fijas de su cierre.
En 2016, el Tribunal Constitucional Federal dictaminó que esto había causado un daño a los operadores y que por lo tanto había que pagar una indemnización. El año pasado, tras una demanda de Vattenfall, los jueces del Constitucional germano dictaminaron que el Gobierno federal tenía que regular nuevamente y por completo la base para los pagos de compensación.
El acuerdo actual aún debe ser aprobado por los órganos ejecutivos de los consorcios energéticos. Los puntos clave se incluirán en un acuerdo y se enviarán al Bundestag (Cámara Baja del Parlamento alemán). La reglamentación definitiva entrará en vigor con una nueva ley.
Según los ministerios, los pagos sirven, por un lado, para compensar los volúmenes residuales de electricidad que las empresas ya no pueden generar debido al cierre anticipado de sus centrales, como en el caso de RWE y Vattenfall. Por el otro, se trata de una compensación por las inversiones realizadas en vano, lo que afecta a EnBW, Eon/PreussenElektra y RWE.